Velvet, el nuevo imperio (96×60’), adaptación de Telemundo para EE. UU. hispano del formato original español creado por Ramón Campos y Gema R. Neira, producido por Atresmedia Televisión con Bambú Producciones, en opinión de Jacky Castro, VP de Producción de Telemundo Studios, tuvo como principal desafío “traer la historia de esa época a la actualidad donde todo es muy diferente”.
“El objetivo principal fue revitalizar una historia icónica. Es una historia española que se había hecho ya para el mercado español y la quisimos conectar con la realidad contemporánea de la audiencia en EE. UU. Queríamos conservar el alma romántica de Velvet, pero situarla en un contexto actual diverso que es lo que representa la cultura hispana y que culturalmente fuera relevante, reflejando aspiraciones, desafíos y contradicciones del público latino de este mercado”, comentó a PRODU Castro.
REINVENCIÓN
Consultada acerca del proceso creativo de Velvet, el nuevo imperio, Castro indicó que hubo un equilibrio entre el respeto y la reinvención.
“Al basarse en una historia que ya estaba hecha, tuvimos que hacer una reinvención aparte, llevarla a la actualidad. Desde el inicio, nuestra prioridad fue actualizar los conflictos y resignificar los personajes dándole, sobre todo, una voz y representación más afines al 2025, a la actualidad. La historia original estaba hecha en los 50s. También se puso un gran énfasis en el estilo visual, queríamos que la estética fuera contemporánea, que la moda fuera disruptiva, y hubiera una paleta narrativa que reflejara la sofisticación y el vértigo de la vida moderna que se vive en Nueva York y en esta mezcla de culturas latinas”, expresó.
Destaca Castro que para hacer la historia más relevante a la actualidad y para la audiencia hispana actual se incorporaron temáticas como el Fast fashion, la equidad salarial, la sostenibilidad, la salud mental, la migración, la presión social en redes. “Por ejemplo, el personaje de Ana fue completamente definido como una mujer latina empoderada que eso para nosotros era muy importante: una mujer empoderada, ambiciosa emocionalmente compleja y que representa los sueños y la lucha de muchas mujeres hispanas hoy por hoy en EE. UU.”.
Agrega que la esencia de Velvet es el amor imposible, la pasión por la moda, el drama y los blancos familiares empresariales. “Eso se respetó y lo que hicimos fue traducir esa esencia en un código cultural actual incorporando matices que representaban mejor a las distintas identidades dentro del mundo hispano, desde México, el Caribe y Sudamérica”, apuntó.
Refirió que en Velvet, el nuevo imperio, laboran fijo unas 400 personas y muchas más se agregan como extras. “Mucha gente participa en este proyecto porque tenemos pasarelas, eventos. Hay mucha gente entrando y saliendo por el tema de los desfiles”, citó.
Indicó que este fin de semana se culminan las grabaciones de la serie que ya lleva 96 episodios.
NUEVA YORK COMO CENTRO DEL UNIVERSO VELVET
La ciudad de Nueva York no sólo fue una locación, sino que “fue el centro del universo Velvet”, enfatiza Castro.
“Mostramos la energía multicultural, los contrastes que hay entre el glamour y la lucha diaria desde las pasarelas de Soho hasta los talleres expandidos que tenemos en Queens por ejemplo. Teníamos diferentes localidades para poder representar toda esta parte multicultural que existe en Nueva York. La ciudad, por ejemplo, creemos que se refleja en los personajes, la moda, los diálogos y los dilemas. Nueva York representa muy bien el tema de la migración, la ambición, la resiliencia, y una belleza, de alguna manera, cruda que está en el ADN de esta adaptación”, explicó.
EL UNIVERSO FEMENINO
Para Castro uno de los pilares fuertes de la nueva versión, es el universo femenino. “El universo femenino que presentamos de las costureras, de la diseñadora, de la gente que trabaja dentro de un almacén tan importante como lo es Velvet. Aquí no solo vimos justo a las mujeres sofisticadas y elegantes, sino también inteligentes y estrategas. Mujeres determinadas que toman las riendas de su destino. Creemos que cada personaje justo aporta una perspectiva única sobre el amor, el poder y la ambición, en un mundo donde la moda y los negocios van de la mano”, refiere.
Indicó que la intención también fue que la historia reflejara la evolución de las mujeres en esta industria, “mostrando la fuerza, pero también su vulnerabilidad y la capacidad para reinventarse, que eso lo representa mucho Ana. Ellas en este universo de Velvet no sólo son musas, sino también arquitectos de su propio futuro”, apunta.
PÚBLICO HISPANO VALORA HISTORIAS CON RAÍCES Y VISIÓN
Para Castro la respuesta de la audiencia a esta nueva versión de Velvet, ha sido “muy positiva, ha sido muy emocionante el entusiasmo del público. Creemos que ha conectado profundamente justo con todos estos personajes, ha conectado mucho con la protagonista. Ha celebrado mucho la estética y ha valorado los temas actuales. Muchos espectadores han comentado que sienten que Velvet les habla, que se ven representados por primera vez en un drama de alta factura que no sacrifica la profundidad por entretenimiento”.
Para la ejecutiva el principal aprendizaje dejado por esta producción, es que el público hispano “valora las historias con raíces y que tienen visión. Adaptar para nosotros no es copiar, es interpretar. También entendimos que las audiencias desean calidad, representación y complejidad. No quieren los típicos clichés, sino protagonistas, con esos matices, conflictos actuales y narrativas que los respeten intelectualmente y emocionalmente, y, además, que los representen”, finalizó.