TELEVISIÓN

La industria mexicana reacciona de manera independiente ante la falta de medidas gubernamentales

16 de marzo de 2020

Maye Albornoz

Bandera de Mexico

El anuncio de la Secretaría de Educación Pública (SEP) sobre la suspensión de clases para evitar el contagio de coronavirus del sábado 15 en la tarde cambió el ánimo en México, que en general se había mantenido en calma. Quizás “demasiada tranquilidad” según la opinión de algunos.

Hace poco más de diez años, México sufrió una epidemia por una mutación del virus de la influenza H1N1. Una parte de los consultados considera que justo por este recuerdo, en donde hubo una paralización del país, la llegada del coronavirus podría percibirse —erróneamente— como menos grave.

“Es un problema de información. El H1N1 fue una epidemia que era mortal para cualquier edad. El COVID-19 no es tan mortal, pero sí puede generar un colapso en las instituciones de salud, si se viene contagio masivo. Empresas y Gobierno deberían impulsar esto” dijo un ejecutivo, quien prefirió mantener su identidad en resguardo. Otro, agregó: “Con el H1N1, aunque se reaccionó un poco tarde, hubo claridad en los mensajes y en los planes”.

Otros opinan que hay más afectados de los que se han hecho públicos y consideran que las acciones oficiales deberían ser más contundentes. Entretanto, algunas de las compañías en el ramo de la producción esperan el pronunciamiento oficial de la Asociación Mexicana de Filmadoras. Mientras, como hemos reportado en PRODU, algunas otras se adelantaron y ya están tomando sus propias medidas.