TELEVISIÓN

Primera huelga de trabajadores en Canal 13 de Chile

30 de junio de 2002


Canal 13 de Chile, uno de los primeros en salir al aire en los 60 y el más visto e influyente hasta la década pasada, vive una profunda crisis económica, que hoy se verá representada con la primera huelga de sus trabajadores.Según el presidente del sindicato de trabajadores, Leonel Cajas, la empresa se comprometió a que en junio del 2002 se reestablecerían todos los beneficios laborales y los sueldos que fueron mermados en la negociación colectiva del 2000.Sin embargo, la oferta de la empresa sólo contempló nuevas rebajas y un congelamiento de los sueldos por los próximos dos años.Cajas afirmó que los trabajadores se instalarán en las puertas del canal, ubicado a los pies de un cerro santiaguino, al lado de los canales Chilevisión y Televisión Nacional: “Podrán sacar la señal al aire, pero no podrán transmitir con normalidad”, dijo.Según fuentes internas, la estación de televisión ya tiene listos planes de contingencia que permitan sacar su señal al aire. La mayoría de sus figuras, entre las que se cuentan a los conocidos animadores Cecilia Bolocco y Mario Kreutzberger, no están sindicalizadas. Sin embargo, los conductores de noticieros sí lo están. También los camarógrafos y técnicos. En el primer trimestre del 2002, Canal 13 registró pérdidas por más de US$5 millones y se calcula que terminará este año con un déficit de más de US$10 millones. En los últimos años, la estación ha perdido audiencia frente a sus competidores. En los 90 el canal estatal, Televisión Nacional de Chile (TVN), incrementó su rating, siendo hoy el líder y dejando a Canal 13 en segundo lugar. Entre 2001 y 2002, el canal privado Mega –propiedad del empresario Ricardo Claro y con un porcentaje accionario de Televisa– subió su audiencia hasta desplazar a Canal 13 al tercer lugar.El sindicalista Cajas reconoce esta grave situación. Sin embargo, cree que los trabajadores representan un porcentaje muy bajo dentro del flujo de gastos. Por eso, él apunta a un mayor control de la plana ejecutiva de la estación. A principios de este año, cerca de 100 trabajadores dejaron el canal.Si bien esta vez han mantenido silencio, los ejecutivos de Canal 13 han reconocido que la estación funcionó con presupuestos “inflados” producto de la bonanza económica de los 70 y 80. En la estación católica los trabajadores ganaban más que en los otros canales, la planta era mayor y el sueldo a los animadores e invitados internacionales era incluso mayor que el que se pagaba en el extranjero.Otro factor que ha enturbiado las relaciones entre trabajadores y la empresa es la externalización de productos. Para salir de la crisis y abaratar costos, terminados los 90 y por primera vez en su historia, Canal 13 comenzó a realizar programas con productoras independientes.Hace un mes, la estación se asoció con Pol-ka de Argentina y Chilefilms de Santiago, en la producción conjunta de una telenovela: la adaptación de la exitosa Son amores que en Chile se llamará Buen partido y se transmitirá en el horario previo al noticiero central.Canal 13 el año pasado cerró su Área Dramática por el sucesivo fracaso de sus teleseries.Este acuerdo molestó al sindicato, que considera que deja a muchos de sus trabajadores sin fuente laboral. Finalmente, equipos humanos de la estación están trabajando en Buen partido, que competirá en agosto con la teleserie chilena Pura sangre, de TVN, y con la mexicana El juego de la vida, que emitirá Mega.