Erika Della Giacoma
El término LGBTIQ+ surgió originalmente como LGB en los años 90, para reemplazar la expresión gay u homosexual que se usaba para englobar también a lesbianas y bisexuales. Con el paso del tiempo se incluyeron nuevos
conceptos para identificar otras identidades de género y de orientación sexual.
LGBTIQ+ se da como lucha por la igualdad y contra la
discriminación, y hace referencia a las palabras lesbiana (mujeres atraídas por
su mismo género), gay (hombres atraídos por su mismo género), bisexual (atraídos
por los dos géneros); la letra T engloba: transgénero (personas que se
identifican con el sexo opuesto al de su nacimiento), transexual (personas que
se identifican con el género opuesto al que nació y se somete a cirugía para
cambio de sexo), travesti (personas que tienen tendencia a vestir como las personas
del género opuesto), intersexual (nacen con genitales de hombre y mujer a la
vez) y queer (personas que quieren estar sin etiquetas).
Con el tiempo se añadió
al final del término el símbolo + para englobar las minorías, como las personas
asexuales (bajo o nulo interés por el sexo), demisexuales (que necesitan
conocer a la persona para sentir atracción sexual) o pansexuales (atraídos por
otras personas sin importar su sexo o identidad de género).