Mastodonte: Samuel Ríos y Valles deja una huella indeleble en el corazón del medio publicitario y cinematográfico de México

“Nuestro mundo detrás de las cámaras no volverá a ser el mismo. Nuestro queridísimo amigo y colega director, Samuel Ríos y Valles, ya no está con nosotros, pero deja una huella indeleble en el corazón del medio publicitario y cinematográfico de México” comunicaron desde Mastodonte, tras el asesinato del director mexicano Samuel Ríos y Valles. 

“Sam, como lo conocíamos, sin duda marcó un sin número de vidas y almas, siempre meticuloso hasta en los más pequeños detalles. La estética era su pasión y se puede ver en cada una de sus piezas publicitarias, así como en su entorno personal. Siempre profundo y profesional, contrastaba con su peculiar humor, que hacía de cualquier situación tensa un gran momento para recordar” expresó la productora.
 
Rios y Valles, nacido en México y también diseñador gráfico, fue asesinado el 27 de febrero tras un intento de robo en Ciudad de México.

“Siempre andaba con un pequeño cuaderno y lápices en mano. También era un devorador de libros, siempre feliz de recomendar o compartir una buena lectura. En su constante afán de aprender, en Los Ángeles estudió dirección de actores, comedia, escritura de guión, improvisación y producción teatral con los mejores de la industria” recuerdan desde Mastodonte.

En su regreso a México, escribió y dirigió los cortometrajes No me mandes a mí y Los detalles olvidados.

“Obsesionado con la perfección, nunca dejo de prepararse buscando la excelencia en el manejo de la dirección actoral, lo cual lo hizo alcanzar uno de sus grandes sueños, inmortalizarse con su ópera prima que estrenó en julio del año pasado: “Los días que no estuve”, Selección Oficial del Festival Internacional de Cine de Mallorca en 2021” comentó Mastondo. 

Samuel co-fundó Mastodonte hace nueve años. “Hizo crecer nuestra casa productora hasta convertirla en lo que es hoy, un Mastodonte sólido con una gran familia detrás cobijando sueños y proyectos. La pérdida de Samuel es irreparable, sin embargo, lo que nos deja son cimientos profundos. Revisitaremos sus cortos, sus piezas de publicidad, sus películas y por supuesto nuestras vivencias con él para continuar creciendo el legado de la empresa que con tanto cariño y trabajo formó. Sam fue sin duda un alma brillante que iluminó y seguirá iluminando todo lo que tocó” concluyeron.