El trabajo creado por las agencias BBDO New York y AMV BBDO, y Tom Kuntz como director del comercial, declara que “el mundo está fuera de lugar” y presenta una solución absurdamente satisfactoria para solucionarlo: abrir un gran hueco en la tierra, donde un helicóptero deja caer un Snicker gigante para alimentar al planeta y de esta manera arreglarlo