El corto dirigido por Romarico Cibrián, ofrece una mirada cruda sobre el impacto del ciberacoso adolescente. Con el mensaje “Los comentarios pueden ser igual de letales que una bala”, la pieza revela cómo palabras escritas en internet pueden dejar cicatrices tan profundas como una agresión física, planteando una reflexión urgente sobre la responsabilidad digital. No solo visibiliza el problema, sino que también se propone como un punto de apoyo para quienes lo sufren, llevando al público un mensaje claro y esperanzador: no estás solo/a.
Agencia: (anónimo)
Casa Productora: Whisky