Convierte una superstición futbolera profundamente arraigada —la creencia de que pasar la sal durante un partido trae mala suerte— en una experiencia creativa cargada de humor y simbolismo popular. Con una narrativa visual que imita los rituales de los hinchas y un tono cercano al folklore futbolero, la campaña propone revertir la mala suerte con el uso del propio producto, transformando un gesto cotidiano en una especie de “amuletismo” colectivo. La pieza conecta emocionalmente con los fanáticos al hablar su mismo idioma: pasión, cábalas y fútbol.
Agencia: NAME, Bogotá / VML, New York
Casa Productora: AKIRA CINE Bogota / BELIEVE TV Santiago / NAME Bogota / VOX HAUS Porto Alegre