María Teresa, empresaria exitosa y atractiva, se ve envuelta en problemas cuando su padre Esteban es acusado injustamente de fraude. Para salvarlo, María Teresa asume el control de "La esperanza", una propiedad codiciada en Puerto Bravo. Allí se encuentra con Santos, el capataz de la hacienda, quien inicialmente la recibe de mala forma. A pesar de sus diferencias, María Teresa y Santos deben unirse para enfrentar a Marco, un vecino avaricioso, y a Rutilio, el corrupto alcalde del pueblo. Mientras luchan por salvar la hacienda, María Teresa y Santos comienzan a llevarse mejor y se enamoran. A pesar de las complicaciones, la brújula para María Teresa y Santos en medio de una tormenta desatada por la pasión será siempre su amor y “La esperanza”.