Marcela Citterio
La escritora y empresaria Marcela Citterio está actualmente muy enfocada en su editorial The Orlando Books, sumando cada día títulos para ofrecer a las plataformas. Paralelamente está trabajando en el desarrollo de dos películas y una serie que fueron opcionadas y de las que todavía no puede revelar detalles.
Se suman tres libros opcionados con una empresa para México, lo que la motiva mucho porque siente que sus historias se abren camino a la industria audiovisual.
Por otro lado, también lanzó un ebook, La hija de la vampira, dentro de un nuevo Universo Oculto. Está trabajando con una agencia de Brasil para llevarlo a editoriales de ese país y acercarlo al público brasileño, que en este momento puede ver por SBT Heidi bienvenida a casa, la serie que escribió y produjo y “que sigue dándome alegrías: ganamos un premio en Colombia y será llevada a los cines este año la película Inolvidable Heidi, rodada íntegramente allá y que dirigí con Andrés Valencia. Un lujo”, informó.
Sobre la ficción opinó que hoy el contenido es más valioso que nunca. Se quieren hacer proyectos de gran producción, pero también se buscan historias potentes que no requieran presupuestos excesivos, un camino inevitable ante los costos tan elevados de estos últimos años.
“También cambió que, al principio, las plataformas producían de forma directa y ahora prefieren coproducir, asi que contar con un socio productor fuerte se volvió clave. Además, los puestos ejecutivos, salvo raras excepciones, duran muy poco y eso hace que todos quieran apostar a lo seguro. Pero la paradoja es que es la vida, y la buena ficción, no siguen libretos seguros. En esa tensión, se toman pocos riesgos, se hacen menos capítulos, y la ficción termina perdiendo espacio. Aun así, sigo creyendo que las historias que conmueven siempre encuentran su lugar y ahí vamos a estar nosotros para contarlas”, señaló.
Destacó que el trabajo de los autores se transformó profundamente ya que pasaron de escribir novelas de 200 o 300 capítulos a series de 8, 10, 12 episodios, y con largos intervalos entre temporadas porque el proceso se vuelve muy lento.
“Y en este proceso demorado, ahora los ejecutivos tienen por lo general una gran participación en el contenido y si bien el trabajo en equipo es maravilloso y lo defiendo, creo firmemente que el autor es como el piloto de fórmula 1: Cuando le das la Ferrari, hay que dejarlo manejar. Yo tuve la bendición de volver a la televisión abierta con Nina de azúcar en Perú, un proyecto por que el que estoy muy agradecida con Michelle Alexander y Del Barrio Producciones. Fue volver a sentir la adrenalina de la novela diaria, trabajar por primera vez directamente para el público peruano y conocer a un equipo de profesionales de primera. Pero soy muy consciente de que fue una excepción: ha sido como la frutilla del postre”, describió.
Ante la situación de los medios surge la palabra reinventarse que para Citterio es “su mantra diario”. Con su editorial siente que ya dio un gran paso en esa dirección: apostar por obras de excelentes autores y por sus propios libros.
“Empecé este camino literario con La chica que no quería ser Princesa, luego la recientemente lanzada La chica que no quería ser Reina, y también el libro de Mirada indiscreta que escribí para Netflix Brasil y se llama Lady voyeur. Ha sido la serie más vista de la plataforma en Brasil en 2023 y se que eso tarde o temprano, abre puertas. También comparto directamente con mi público en Tik Tok y ahora voy a abrir mi propio canal de YouTube”, dijo.
“Cada día me pregunto cómo seguir adaptándome a este nuevo panorama, porque amo mi profesión y se que no hay una sola forma de contar historias. Por eso pruebo ideas nuevas, me conecto con colegas del medio con los que compartí tantos proyectos y sigo adelante, con ensayo y error, sin miedo y con la certeza de que para quienes sabemos crear contenido, siempre habrá una forma de llegar a la gente porque las historias siempre encuentran su camino y mi forma de acompañarlas es una sola: reinventarme”, finalizó.