Centrada en empoderar a jóvenes víctimas de bullying al recuperar y amplificar sus publicaciones eliminadas en redes sociales. La campaña les devolvió visibilidad y voz, reconstruyendo mensajes censurados con diseños potentes que reforzaban su autoestima y capacidad de resiliencia. Al dar nuevo impulso a esas publicaciones, Dove transformó la censura digital en una plataforma de apoyo emocional, generando conversación y solidaridad en su comunidad social.
Agencia: VML, Buenos Aires
Casa Productora:Mamá Húngara, Buenos Aires