
Diego Castro, CEO de Tequila Design
En un mercado donde las audiencias exigen experiencias únicas y las marcas buscan conectar a nivel emocional, la personalización dejó de ser un valor agregado para convertirse en una estrategia de marketing indispensable. En este contexto, Diego Castro, CEO de Tequila Design, explica cómo la hiperpersonalización se transformó en un diferenciador poderoso para marcas, corporativos y equipos creativos que buscan elevar su conexión con clientes, colaboradores y socios estratégicos.
Castro dejó claro que la tendencia dominante en 2025 y los siguientes años es la hiperpersonalización aplicada a productos físicos, obsequios corporativos y activaciones de marca.
“Las personas ya no quieren comprar lo de siempre. Quieren productos que conecten con su historia y con sus gustos”, afirmó.
Para Tequila Design, esa precisión emocional es el corazón de su propuesta: cada botella inicia con un proceso artesanal y después se convierte en una pieza única gracias a la impresión digital avanzada y al trabajo de ilustradores.
“Nos enfocamos primero en el cliente y luego en el producto. Nosotros hacemos tu propio tequila”, expresó.
El ejecutivo dijo que Tequila Design ha encontrado una ventaja estratégica: sus botellas personalizadas permanecen visibles por años en escritorios, cavas o espacios de trabajo, generando branding continuo.
“Las empresas matan dos pájaros de un tiro: regalan algo original y a la vez mantienen su marca presente por mucho tiempo”, explicó.
Cada pieza funciona como un recordatorio emocional del vínculo entre la empresa y su stakeholder. Esto activa el principio de reciprocidad que refuerza lealtad, compromiso y percepción de valor.
Aseguró que el proceso de diseño va más allá de colocar un nombre o logo. Involucra ilustración manual, diseño conceptual y producción completa: “Podemos poner personas, mascotas, paisajes, productos… lo que te imagines”.
Incluso agregan elementos multimedia: “Ya podemos integrar videos o fotos en un código QR para que la botella cuente una historia más profunda”.
La hiperpersonalización se vuelve así un vehículo narrativo para las marcas.
Castro destacó que su modelo democratiza el acceso a un producto premium: “Atendemos desde una pyme hasta el emporio que tú me digas; no tenemos mínimos y el precio es el mismo para todos”.
Esto convierte la herramienta en una opción accesible para empresas que buscan diferenciarse sin operar grandes volúmenes.
Su portafolio incluye proyectos para empresas como Cemento Moctezuma, Hospital Ángeles, Interceramic, Pilgrims, Semex, Bachoco, Verel, entre otras.
Además, la marca es tequila oficial de equipos de la Liga MX como Chivas, Rayados, Atlas y Santos: “Si eres de Rayados, la botella lleva el jersey del equipo y tu nombre como si fueras futbolista”.
Este enfoque convierte la personalización en un activador de engagement y lealtad de marca.
La diversificación también forma parte del crecimiento estratégico de la compañía. Tequila Design creó Mezcal Design, una línea que replica el mismo concepto de personalización pero enfocada al mezcal elaborado en Oaxaca. Castro explicó que esta expansión fue resultado natural de la demanda del mercado y del potencial emocional del producto.
“El Mezcal Design es el mismo concepto, pero con mezcal. Es espadín, lo hacemos en Oaxaca y lo lanzamos hace como dos años”, detalló.
Aunque la operación está enfocada por ahora en México y EE UU, la compañía planea fortalecer primero estos mercados antes de abrir nuevos territorios.
Sobre el rol de la data, Castro expresó: “Sin datos no tienes nada. Es la herramienta más poderosa para segmentar y conocer a tu público”.
La empresa utiliza sistemas que organizan y clasifican clientes para generar insights que permitan diseñar experiencias más relevantes: “Los clientes cada vez quieren más. Quieren conectar con el producto y sentirse parte de lo que están comprando”.
Tequila Design se apoya en marketing digital para ampliar su visibilidad: “Somos la séptima marca de tequila con más comunidad en Instagram. La era digital es esencial para nosotros”.
Su estrategia combina redes sociales, colaboraciones e iniciativas que educan al mercado en torno a la hiperpersonalización.
La visión de Castro es contundente: “El regalo corporativo no puede ser un trámite; debe ser una herramienta potente para conectar personas”.
La unión de diseño, tecnología y artesanía convierte a Tequila Design en un vehículo para reforzar relaciones comerciales, elevar la percepción de marca y generar experiencias memorables.