Los retos que trae el 2024 en sostenibilidad a las empresas de la industria audiovisual

2024 inicia con nuevos retos para las empresas del audiovisual en el terreno de sostenibilidad. PRODU consultó a las principales asesoras en este tema, que coinciden en apuntar que el principal reto es consolidar y sistematizar las buenas prácticas. Es decir: que sea parte de la acción cotidiana de toda productora el incluir acciones para reducir la huella de carbono en su trabajo.

Creast Network, Mrs. Greenfilm, Green Proyections y EcoFilming indican que la base de conocimiento de la industria sobre sostenibilidad se ha extendido. Muchas productoras ya tienen un departamento dedicado al tema. El reto de 2024 es normalizarlo e ir más allá: sistematizar prácticas, construir y mejorar guías, ampliar la educación y conocimiento sobre el tema a todo el equipo, perfeccionar el cálculo preciso sobre la medición de la huella de carbono y trazar la meta de superarse a sí mismos en cada producción.

Un cambio esperado este 2024 es que las productoras incorporen políticas de gobernanza y gestión, que aseguren la ejecución sistemática de un plan para mejorar la sostenibilidad y medir los resultados.

Lo que no se mide no existe. Por ello el manejo de los datos usando metodologías que son estándar en la industria para la medición de CO₂ es clave, además de medir la realidad demográfica del crew y logrando metas en diversidad, equidad e inclusión.

Incorporar el concepto de “sostenibilidad integral” como parte de la cultura corporativa de cada productora, es otro paso relevante. Incluye avanzar en la sostenibilidad humana y financiera de los proyectos, además del riesgo ecológico, que hasta ahora pareciera ser el único objetivo. Este concepto incorpora los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Es así como también hay que cuidar la diversidad, equidad e inclusión como prácticas cotidianas en los equipos de trabajo, con espacios de trabajo seguros para las minorías.

Otro reto es innovar en las fuentes de energía, el manejo del agua y los residuos. Para ello, incluir tecnología de punta que permita cambiar procesos, ser más eficientes, ser más competitivos, al tiempo que se optimiza el tiempo y el dinero, pero también se cuida al ambiente y al equipo.

Una tendencia que se está observando en Europa, Canadá y EE UU y que pronto llegará a Latinoamérica, es la certificación de los estudios y foros como sostenibles. Más allá de cada producción, el objetivo es que los estudios se certifiquen con el fin que sean espacios 100% sostenibles.

Sigue como objetivo la creación de contenidos que incluyan a la sostenibilidad de manera natural, participar en escenarios globales en donde se definen estándares de sostenibilidad para la industria fílmica y lograr que la especificidad de América Latina sea tenida en cuenta en la definición dichos estándares.