
Actriz Patricia Soto de Un actor malo y el productor Yair Ponce de Catatonia Cine
En el marco de su participación como asesor en la Incubadora de GIFF 2025, Yair Ponce, productor de Catatonia Cine, analizó los retos estructurales que enfrenta la industria cinematográfica mexicana. Habló sobre la falta de mecanismos sostenibles para financiar y exhibir cine, las nuevas formas de producción emergente y el impacto de las plataformas en los costos del sector.
Subrayó la importancia de generar nuevas estrategias de coproducción y equilibrio presupuestal para que los proyectos independientes logren avanzar y observó una generación de cineastas que no solo proponen nuevas historias, sino que cuestionan la forma de narrarlas: “Viene una ola de cineastas emergentes con nuevas propuestas, pero también con cuestionamientos sobre el lenguaje cinematográfico”, afirmó.
Como asesor en la Incubadora del GIFF, el productor destacó que estas ventanas de industria permiten contacto directo entre creadores y productores con mayor experiencia: “Lo ideal sería que tomemos la batuta para desarrollar y financiar estos proyectos. A veces no sucede, pero puede haber excepciones”, agregó.
Desde su experiencia, explicó que uno de los principales problemas estructurales del cine mexicano es que los productores viven de hacer películas, no de exhibirlas o distribuirlas: “Aunque digamos que hay una industria cinematográfica, no existe. Para mí, una industria real sería aquella en la que se vive de exhibir las películas”, dijo.
También opinó sobre la falta de actualización en los estímulos públicos: “Sigue siendo el mismo desde hace más de 15 años, pero los costos de producción han subido”. Además, consideró que la coproducción nacional e internacional es cada vez más necesaria para completar los presupuestos.
El auge del streaming elevó los costos de producción y afectó el esquema del cine independiente, de acuerdo con el productor: “Mucha gente que trabajó para plataformas ahora quiere cobrar lo mismo en una ópera prima, y eso no es viable”, explicó. También comentó que hace falta una legislación clara sobre los honorarios de crew técnico.
Ponce mencionó que su trabajo como productor implica adaptar el diseño del proyecto al financiamiento disponible: “A veces no se trata de buscar más dinero, sino de escribir una película que funcione con el presupuesto que puedes conseguir”, señaló.
Actualmente, Catatonia Cine desarrolla varios proyectos: La tercera película de Jorge Cuchí, la ópera prima de Paula Job, y un cortometraje de Edgar Baena con la participación de Kate del Castillo. También cerraron el ciclo de Un actor malo, nominada en diversas categorías de los Premios Ariel.