
Bienvenidos a la familia
Bienvenidos a la familia es la apuesta de comedia negra de Máquina Vega para Netflix que estrena este miércoles 12 de marzo. Basada en la serie catalana Benvinguts a la família y adaptada por Mark Alazraki -quien además es el showrunner– la propuesta tiene como reto el tono en el que se mueve la serie: entre la farsa, el thriller, la comedia negra y la acción.

“Me siento muy halagado con esta premisa. Honrado de que me digan que creen que puedo sacarlo adelante”, dijo a PRODU Mark Alazraki, tras comentar que le dieron mucha libertad en todo el proceso de creación. Sin embargo, sin duda, manejar el tono correcto ha sido el gran reto de este trabajo.
La línea fina entre lo burdo y lo chistoso, lo explícito y lo escondido, hace que esta historia se mueva peligrosamente entre lograr desatar la carcajada en la audiencia y el riesgo de convertirse en un mal chiste.
“Este es un thriller cómico al final del día. La comedia es un negocio muy serio. Lo más difícil es venderle a una audiencia que el policía no vio lo que pensó que vio o que el muertito esté saludando a los vecinos y que nadie se dé cuenta porque tiene un tapabocas. Necesitas que el público se aviente un clavado de fe”, comentó Alazraki, tras explicar que la invitación es a no buscar una lógica y así poder escapar de la realidad.

Moises Chiver es productor ejecutivo
Destacó que en el manejo del humor es muy importante el timing. “A veces va rapidísimo, pero una pausa o un silencio, puede generar comedia. Nuestro approach, cuando trabajábamos, fue perdirle a los actores que jugaran, obviamente con mucha verdad. Yo soy mucho de jugar en el set y de improvisar. Nunca les pido una toma igual. Siempre quiero que la cambien, que hagan una más alta, una más lenta, una más rápida, otra más enojada. Con esta variedad, puedo trabajar luego en el cuarto de edición”.
Bienvenidos a la familia cuenta la historia de Cristina (Marimar Vega), una madre soltera que ve que su vida se desmorona. Ello cuando descubre que su padre ha dejado la casa como garantía de una deuda con la mafia. Tras su repentina muerte, Cristina se enfrenta al reto de salvar su hogar. Decidida a recuperar lo que le pertenece, une fuerzas con Luciana (Erika Buenfil), esposa de su padre, y juntas elaboran un arriesgado plan para engañar al mafioso. Su idea incluye esconder el cuerpo del padre y falsificar su testamento. Sin embargo, deben ser astutas para evitar que una vecina entrometida y un policía enamoradizo descubran la verdad en esta comedia llena de enredos y situaciones inesperadas.
“El cast fue el valor de producción más grande, sin duda, en este proyecto. Ello junto a nuestras cabezas de departamento”, comentó Moises Chiver, productor de la serie.
El elenco está formado por: Erika Buenfil, Marimar Vega, Ana Layesvka, Erick Elías, Jezzini, Martín Altomaro, Alondra García, Santiago Colores, Hernán Del Riego, Carla Adell y Ricardo Selmen. Con la participación especial de Arturo Beristáin.
El casting es de Alejandro Reza y Rezacasting.
Mark Alazraki señaló que es el primer proyecto en Netflix de Erika Buenfil, quien sale a la plataforma haciendo comedia luego de una larga vida en Televisa en el papel de villana. “Aquí se va a ver otro nivel de Erika”. Buenfil tiene un trabajo notable como creadora digital, conectando con grandes audiencias.

Erika Buenfil en su primer proyecto para Netflix
Es también la primera vez que Marimar Vega tiene papel de madre, en este caso soltera y con tres hijos. Cuentan con la participación de una actriz infantil, Alondra García, en su primer proyecto con un gran trabajo, y de un actor con sindrome de down, Ricardo Selmen, “que es excelente actor”.
Ambos informaron que incluyeron dummies para representar al cuerpo del padre que se va descomponiendo conforme avanza la serie, con tal grado de realismo, que el actor que hace el papel del padre que muere, quedó en shock al verse tan bien representado.
Comentó Alazraki que el proyecto llegó por la invitación de Francisco “Paco” Ramos y Carolina Leconte, quienes le asignaron el después de Reviviendo la navidad.
“De trece horas que tenían la versión original, la llevamos a cuatro horas, es decir, ocho episodios de media hora”, contó.
Explicó que para escribirlo trabajaron Silvia Ortega, “excelente escritora y quien fue la cabeza del cuarto de escritores, con Pablo Aramendi, Andreina Borges, Pablo Ortiz Cortés y la asistencia de Ricardo Ruiz Lezama”. Gracias a este equipo generaron una magia muy grande. “Trabajamos con Roberto Stopello que ayudó durante el proceso de los guiones y fue un gran aporte. Hicimos un gran equipo con Netflix”.
Recordó Moisés Chiver que Alazraki se atrevió a meter comediantes que en su vida habían escrito para una serie, en el cuarto de escritores.
Chiver agregó que contaron con un gran equipo detrás de cámaras: además de la producción ejecutiva de Mark Alazrak (y Moises Chiver), se contó con la dirección de Mark Alazraki en cuatro capítulos y de Jorge Macaya en los otros cuatro.
En la producción junto a Chiver estuvo Adrian Ituarte y el productor en línea fue Carlos Rueda. En la asistencia de dirección Mari Delgado.
El proyecto llegó nueve semanas de rodaje, y un gran reto fueron las escenas de comedia de acción. “Hay persecusiones, explosiones, precipicios, derrapones de coches. Todo muy retador, por la seguridad, pero también por los recursos. Y además, porque nunca lo habíamos hecho”, comentó Chiver.
“Nunca habíamos hecho escenas de acción y de comedia al mismo tiempo juntos y creo que eso fue lo que más nos divirtió a nivel reto en esta serie”.
Mark Alazraki dijo que quiso entregar un proyecto con muy altos valores de producción, y eso se encuentra en la serie. “Para mi fue muy importante que se viera una serie grande, y pienso que se consiguió”.