
Gustavo Perdomo
Como le dijo el Tío Ben a Peter, “un gran poder conlleva una gran responsabilidad”. Y la Inteligencia Artificial (IA) nos enfrenta a un poder sin precedentes. Según IAB Colombia, se proyecta un incremento del 30% en la eficiencia de las campañas publicitarias gracias a la IA. Un avance prometedor, pero que exige una reflexión profunda sobre sus implicaciones en el marketing desde todos los frentes.
La visión artificial, por ejemplo, nos brinda la capacidad de analizar datos visuales con una precisión asombrosa. Sin embargo, estudios como el de la Universidad de los Andes, específicamente el artículo “Racismo en la IA: un problema más allá de la tecnología” de Cerosetenta, revelan que los algoritmos de reconocimiento facial pueden mostrar sesgos, afectando desproporcionadamente a ciertos grupos demográficos. ¿Estamos dispuestos a sacrificar la equidad en aras de la eficiencia?
La recopilación masiva de datos, esencial para el funcionamiento de la IA, plantea serias preocupaciones sobre la privacidad. A pesar de la existencia de la Ley 1581 de 2012, la opacidad de los algoritmos dificulta la garantía del consentimiento informado. En un contexto donde cerca del 95% de los usuarios no (leemos porque me incluyo) los términos y condiciones (letra pequeña), ¿cómo podemos asegurar la protección de los datos personales?
McKinsey Global Institute, estima que la automatización impulsada por la IA podría eliminar hasta el 28% de los empleos en el sector del marketing en los próximos años. Lo que nos llevar pensar en una respuesta urgente en términos de capacitación y reconversión laboral.
Un ejemplo de su uso reciente acá en Publicis Groupe Colombia, fuimos reconocidos por 2do año, con el premio Next Generation Partners en Google, por el uso estratégico de la IA en AdTech (DCO), demostrando que esta tecnología puede ser una aliada poderosa para la creatividad y la innovación. Sin embargo, somos conscientes de la responsabilidad que conlleva este poder y buscamos que la curaduría humana sea la encargada SIEMPRE del resultado final.
Así que en este caso, todos somos afortunados de contar con este gran poder, pero también con grandes responsabilidades. Nos exige un debate profundo sobre los valores que queremos preservar y el tipo de futuro que queremos construir. La responsabilidad no es solo de las personas de marketing, sino de todos nosotros. Debemos exigir transparencia, equidad y regulación. No se trata de frenar la innovación, sino de asegurarnos de que la tecnología sirva al progreso de la sociedad y no se convierta en una versión criolla y real de Skynet.
Por:
Gustavo Perdomo
Digital Lead
Publicis Groupe Colombia
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