Coty Cagliolo, Martín Solmesky y Johanna Helman
La icónica serie 100 mexicanos, adaptación local de Family Feud, se vio por primera vez en la pantalla de TV Azteca el pasado 26 de agosto.
El mayor reto para el equipo de Fremantle México fue diferenciarse —tras haber estado por dos décadas en distintas etapas en Televisa— además de mantener la esencia del programa, que pronto cumplirá 50 años.
Johanna Helman y Martín Solmesky con Luis Canseco, director de Producción de 100 mexicanos
Para Johanna Helman, VP de Producción, y Martín Solmesky, productor ejecutivo de Fremantle, esta edición que involucró varios retos, tuvo un gran acierto con la incorporación de El “Capi” Pérez como conductor del espacio, con su estilo fresco y agudo, agregando el humor a cada capítulo.
“Evidentemente es un cambio de pantalla muy fuerte, porque es un show muy identificado con Televisa desde hace años y claro que la gente va a hacer comparaciones. Tenemos la suerte de encontrarnos con un conductor que realmente es un distintivo en 100 mexicanos” dijo Helman.
El formato de Fremantle está basado en el internacional Family Feud, que cumplirá 50 años en 2026 y tiene pantalla en 76 países del mundo.
El programa contó la participación de 340 celebridades, por lo que fue un gran reto para el equipo de producción coordinar agendas para poder contar con estas estrellas en las grabaciones. Actrices y actores, conductores de televisión, en su mayoría, y algunos influencers, fueron parte. Según Solmesky la participación de celebridades de las redes sociales permitieron actualizar las claves de comunicación con el público.
“Los influencers conectan con lenguajes más inmediatos sin dejar de lado la historia y el enclave mexicano. Se busca así tener un lenguaje más acorde con los tiempos y con la inmediatez” explicó Solmesky, tras comentar que fue parte de la renovación en el área del contenido.
Este programa destaca por su impresionante set ubicado en el foro más grande de Azteca en Miramontes. Con mil doscientos metros cuadrados equipados con tecnología LED en pantallas que ocupan todo el espacio, la producción buscó ofrecer una experiencia visual impactante que rivaliza con las versiones internacionales del formato.
Solmesky mencionó que este cambio ofreció visuales que hacen una enorme diferencia con versiones anteriores. “El vuelo de la grúa revela un set espectacular. Es un foro que tiene mucha altura, entonces a la grúa le pudimos poner casi todos los tramos con los que tiene un vuelo muy lindo, la verdad” comentó. Sin embargo, el tamaño del set trajo el reto del manejo de cámaras, con el fin de no perder las reacciones ni la cobertura de todo lo que estaba pasando, “sobre todo con un conductor como El Capi, que genera comedia todo el tiempo” explicó.
Agregó Solmesky que el trabajo de casting para este programa fue impecable. “El trabajo con el equipo de Azteca fue estupendo. Costó hacer el casting y cuadrar las agendas, pero se ve estupendo en la pantalla” dijo.
Para Johanna Helman la participación del conductor y su habilidad para hacer comedia adecuada en horario familiar, hizo una diferencia muy importante. “En los tiempos en los que estamos no se puede hacer comedia con todo, pero él no desperdició ninguna oportunidad. Hizo un trabajo muy artesanal de encontrar el momento indicado y los temas para provocar la comedia” comentó, tras afirmar que su humanidad y la relación auténtica que hizo con el público y con el equipo de producción, también colocó al programa un tono muy especial. “Hemos trabajado con un montón de de celebrities en nuestras carreras y honestamente hace mucho tiempo que no veía a un conductor tan cercano con la gente” comentó.
