Ana Barreto y Clara María Ochoa de CMO
La productora colombiana CMO se encuentra en una nueva etapa con proyectos originales, liderado por mujeres y el mismo enfoque detallista que los ha consolidado en la industria audiovisual con producciones como Pálpito, La niña, Correo de inocentes, Regreso a la guaca, entre otros. Así lo comentaron en #PRODUprimetime, Clara María Ochoa, fundadora de la compañía, y Ana Barreto, CEO desde septiembre de 2023.
En un mercado audiovisual global donde la cantidad de contenido crece exponencialmente, CMO se desmarca con una estrategia clara: realizar pocas producciones, pero con altos estándares de calidad y una fuerte identidad creativa.
“No queremos hacer 20 producciones al año, sino dos o tres que sean realmente bien producidas desde el inicio hasta entregarle al cliente su producto final”, afirma Clara María Ochoa. Este enfoque “boutique”, de acuerdo con las ejecutivas, permite a la compañía mantener el control creativo de principio a fin, garantizando que cada proyecto refleje la visión que quieren imprimirle.
Desde su fundación a finales de los 90, CMO ha sido reconocida por series exitosas y una narrativa potente. Hoy, con Ana Barreto como directora ejecutiva, la empresa entra en una etapa de reorganización estratégica que fortalece su estructura operativa y su modelo de producción.
“Desde los que se produjo a finales de los noventas hasta ahora, hay como un hilo conductor y se ve ese sello de CMO. Combinar eso como tan artesanal, en el mejor sentido de la palabra, con empezar a organizar muy bien los procesos desde lo no tan sexy a nuestro negocio, que es lo administrativo, lo financiero, los procesos; creo que es la fórmula perfecta para todo negocio exitoso”, explica Ana Barreto.
CMO tiene actualmente unos 15 proyectos en desarrollo, todos nacidos en su taller creativo, liderado por Johanna Gutiérrez, junto con Clara María y Ana. Allí se gestan historias originales, adaptaciones literarias y colaboraciones externas, siempre bajo un proceso de curaduría que privilegia la coherencia narrativa y la calidad estética.
Este proceso le da a la productora una voz clara, con proyectos que reflejan tanto la diversidad de géneros como la profundidad de los relatos. Una de las próximas producciones que se estrenará es la segunda temporada de La venganza de Analía, proyecto para Caracol Televisión.
La mayoría de las áreas de CMO están lideradas por mujeres: cinco de siete, lo que evidencia el compromiso de la compañía con la equidad y el liderazgo femenino en la industria audiovisual colombiana.
“Todo funciona como un relojito”, dice Clara María Ochoa en referencia al engranaje preciso entre las distintas áreas, desde la creación hasta la posproducción. En esta nueva etapa con Ana Barreta al mando, la califica como una mujer “talentosísima. Inteligente. Metódica, Muy workaholic”, que ha sido clave en la reorganización de CMO.
A su vez, Ana Barreto admira en Clara María su creatividad y capacidad de trabajo y mejora. Cuenta que en un mismo día a la fundadora de la compañía se la puede ver “sentada en el escritorio para leer el guión, para después ir al set, corregirle la corbata al actor y luego estar en la posproducción para definir que cuadro va delante de cuál”.
Clara María Ochoa es una de las pioneras de la industria audiovisual en Colombia. Contó que empezó en los Juegos Panamericanos de Cali en 1971, cuando fue asistente de Diego León Giraldo que hizo una película sobre el evento.
Su pasión por lo audiovisual le viene de sangre y de tierra: lo primero porque su abuelo Fernando Domínguez tuvo una de las primeras empresas cinematográficas de Colombia; y lo segundo porque en su natal Cali hizo parte de un movimiento audiovisual con reconocidos creadores audiovisuales como Carlos Mayolo, Luis Ospina o Sandro Romero.
CMO no solo está posicionada en Latinoamérica como una casa productora capaz de levantar y realizar proyectos propios, sino también como un aliado estratégico para producciones internacionales que buscan grabar en Colombia, especialmente para aprovechar los incentivos tributarios audiovisuales.
Ana Barreto afirma que como empresa productora colombiana tienen la capacidad de trabajar de la mano con todas las compañías que quieran tener estos beneficios“.
No es solamente salir con la promesa de que vamos a devolver el 35%, sino efectivamente hacer de esto una realidad. No es fácil”, sostiene y añade que en los proyectos más recientes “hemos terminado rodaje y aproximadamente dos meses después estamos finalizando el proceso de legalizaciones y de todo ese proceso documental”.
Más allá de los incentivos fiscales, Clara María Ochoa destaca que un plus de grabar en el país es la creatividad y ganas de salir adelante de los trabajadores del audiovisual colombiano. Comparte como ejemplo que si en una grabación se daña “una pata de un trípode, siempre hay alguien que dice que lo arregla y se hace inmediatamente. En otros países se apaga la producción y hasta mañana. Y no hay manera de seguir produciendo”.
Hoy, con más de dos décadas de experiencia, CMO reafirma su propósito: cuidar cada historia como una obra única, con pasión y visión artística. “Las producciones series pueden salir mucho mejor cuando son creadas al interior y estamos en comunicación con los personajes, con la historia, desde el momento cero”.
Con un equipo sólido, una visión creativa clara y una operación eficiente, CMO tiene una marca con sello propio en la industria del contenido de Colombia y la región: “No hay nada más lindo que una compañía liderada con cariño y con pasión. No es un tema de tamaño o recursos. Es un tema de hacer las cosas con mucho cuidado y buscando siempre el mejor resultado”, concluye Ana Barreto.